Florida con la comunidad latina a la cabeza, hoy inspira mucha más confianza a los grandes inversores que las frías calles de Manhattan
En el mainstream media americano desde hace varias décadas se ha ido impartiendo un relato que busca presentar al latino que llega por Florida o Texas como un hombre necesitado, débil, inculto, que ha escapado de su país de origen y necesita desesperadamente de ayudas gubernamentales para sobrevivir.
Esta narrativa ha sido también impulsada por los medios más importantes de la comunidad latina en el país, como es el caso de Telemundo y Univisión, quienes con su mirada progresista han destacado y puesto el foco constantemente en los retenes de la frontera con México y en las poblaciones menos pujantes, pero poco hablan sobre las historias de éxito de los migrantes latinos, que lejos de buscar un Estado pather familias, ha venido a la tierra de oportunidades en la búsqueda de algo muy sencillo: libertad.
Parafraseando a Reagan, nada debería preocuparnos más que cuando el gobierno nos dice: no te preocupes, el gobierno va a ayudarte.
Quienes hemos escapado de los países que sofocan las libertades gobernados por tiranos colectivistas que quieren dirigir a las sociedades según sus propios esquemas mentales y redistribuyendo la riqueza de los privados como si fuera su propio bolsillo, sabemos lo valioso que es sencillamente poder vivir en un lugar donde no tengamos al gobierno respirándonos en la nuca, y dónde el mismo se limite sencillamente a fungir como un protector de los derechos y deberes individuales de cada uno de sus ciudadanos.
Sin importar que los grandes medios quieran imponer esa mirada desesperanzada del migrante hispano, lo cierto es que la comunidad latina es la que más emprende y una de las mayores generadoras de riqueza en el país.
Para el año 2018, según se señaló en The Hispanic Council, la comunidad latina se convirtió en el principal motor económico de Estados Unidos, a pesar de representar tan solo el 18 % de la población; la razón de esto es que el hispano es emprendedor por naturaleza, muchos vienen al país no solo con la intención de trabajar para alguien más, sino también de formar sus propios negocios; para el año 2012 había un poco más de 3 millones de empresas creadas por latinos, para el año 2017 se había presentado un incremento del 46 % consolidando más de cinco millones de empresas.
Florida es el futuro de Estados Unidos
Un nuevo imperio se levanta al sur de Estados Unidos, mientras el tradicional estado líder del país se cae a pedazos —Nueva York—, en Miami y el resto de ciudades de Florida siempre sale el sol. El contraste entre ambos estados no podría ser más extremo, la cuarentena obligatoria impuesta por Cuomo destruyó la economía de la ciudad y dejó a miles de personas sin empleo, muchos de ellos hicieron sus maletas y decidieron marcharse a un lugar donde un tiranuelo —hoy acusado e investigado por supuesto acoso sexual y además por su negligencia al haber ordenado a hogares de ancianos recibir personas infectadas— no les prohíba trabajar para poder comer.
Con Ron DeSantis a la cabeza del estado sur la economía de Florida logró sobrevivir a los embates del coronavirus al permitir a los ciudadanos mayores libertades, manteniendo además mejores registros en salubridad comparado con estados mucho más restrictivos como el propio Nueva York o California.
Pero por supuesto, nada de esto es casual, desde hace varios años los republicanos más afines a los gobiernos pequeños y que respetan e impulsan la iniciativa privada han ganado en Florida, seguidos por una gran comunidad latina que valora el esfuerzo de los líderes del GOP por mantener su estado como tierra de libertades e innovación, que además se planta firme en contra de las tiranías que aplastan a sus conciudadanos en Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Siendo que la comunidad latina es esencial en la elección de las autoridades que rigen las políticas tributarias, económicas y jurídicas, el sistema de Florida representa la esencia latina que aboga por creación de empresas, innovación, bajos impuestos, y libertades individuales.
Francis Suarez, un digno representante de la comunidad latina
El alcalde de Miami, Francis Suarez, de ascendencia cubana, se ha convertido en uno de los pilares para la revolución financiera descentralizada a la que hoy apunta el mundo; Suarez, no solo ha facilitado e invitado a grandes empresarios a establecer sus negocios al sur de Florida, sino que también ha elaborado un plan para que Miami se convierta en la primera ciudad del país en incorporar criptomonedas como el bitcoin a su nomina pública, invirtiendo en dichos activos, y promoviendo parte del pago de nómina en criptomonedas, comprendiendo que esto podrá impulsar una mayor descentralización del poder y permitirá que más personas en el futuro puedan comerciar libremente, para generar mayores riquezas.
Que el gobernador de Florida y el alcalde de Miami en sus políticas públicas promuevan las libertades individuales no es casualidad, lo hacen porque la gente ha votado por ellos precisamente por y para eso, y así de a poco se han transformado en un ejemplo para todo el país que desde la distancia observa —algunos con envidia y otros con alegría— como en Florida se levanta un nuevo imperio que se propone disputarle a Nueva York el título de “La capital del mundo”, y que con la comunidad latina a la cabeza, hoy inspira mucha más confianza a los grandes inversores que las frías calles de Manhattan.
Origen: elamerican.com
"Magazine" 